Las inhibiciones sexuales no nos permiten expresar con libertad nuestras emociones y sensaciones, por miedo al que dirán. Impidiéndonos sentir por temor de que la otra persona pueda asombrase de nuestro comportamiento tan libertino.
Pues debo decirles que se están perdiendo de lo mejor de la relación; aquí les doy unas claves para que puedan quitar esas inhibiciones molestas y se dejen fluir como lo que son, seres libres. No piensen, solo déjense llevar por sus cuerpos y sensaciones, que todo resultara mucho mas placentero.
Bañarse juntos: la ducha resulta ser muy relajante y estimulante, invita a nuestro oscuro objeto de deseo a compartirla. El agua debe encontrarse calentita y en el borde de la bañera podemos apoyar dos copas bien frías de champaña.
La consigna es que cada uno bañe al otro deteniéndose todo el tiempo que desee en las partes que le resulten más interesantes.
Una pareja adecuada: lo importante es que cuando tenemos relaciones no estemos pensando que nos estamos jugando el futuro, simplemente es compartir un momento de placer. Pensar en elegir a esa persona que sabemos que nos desea desde hace tiempo resulta un bálsamo, ya que el deseo acrecienta el deseo.
Es una excelente oportunidad para vencer nuestros complejos y sentirnos sexualmente deseados sin más compromiso que el gozo y el placer.
Si al sexo oral: es un estimulo muy placentero, no hay nada mas intimo que besar los genitales. Y sumamente increíble, porque para un hombre ver a una mujer en esta actitud es un guiño para su vanidad, como es para la mujer todas las muestras de amor juntas.
Muchos hombres admiten que se sienten en el más dulce éxtasis cuando una mujer acerca su boca a sus genitales.
Si a las malas palabras: ayudan a desinhibirnos y nadie va a sorprenderse porque lo que decimos cuando la temperatura sube. Si la situación da para hablar, no te contengas de decir lo que sientas con todo tu ser.
Masturbarse juntos: es una de las practicas mas lujuriosas y placenteras, ya sea apoyados contra una pared, mientras la mujer le bajo el cierre del pantalón y le saca el pene, el hombre levanta su pollera y mete los dedos por su bombacha para estimularle el clítoris, para después introducir los dedos en su vagina. Otra variante es frotar el pene contra el clítoris y los labios hasta llegar al orgasmo.
Ideal que el hombre este sin camisa y la mujer que por lo menos tenga los pechos a medio descubrir
Pues debo decirles que se están perdiendo de lo mejor de la relación; aquí les doy unas claves para que puedan quitar esas inhibiciones molestas y se dejen fluir como lo que son, seres libres. No piensen, solo déjense llevar por sus cuerpos y sensaciones, que todo resultara mucho mas placentero.
Bañarse juntos: la ducha resulta ser muy relajante y estimulante, invita a nuestro oscuro objeto de deseo a compartirla. El agua debe encontrarse calentita y en el borde de la bañera podemos apoyar dos copas bien frías de champaña.
La consigna es que cada uno bañe al otro deteniéndose todo el tiempo que desee en las partes que le resulten más interesantes.
Una pareja adecuada: lo importante es que cuando tenemos relaciones no estemos pensando que nos estamos jugando el futuro, simplemente es compartir un momento de placer. Pensar en elegir a esa persona que sabemos que nos desea desde hace tiempo resulta un bálsamo, ya que el deseo acrecienta el deseo.
Es una excelente oportunidad para vencer nuestros complejos y sentirnos sexualmente deseados sin más compromiso que el gozo y el placer.
Si al sexo oral: es un estimulo muy placentero, no hay nada mas intimo que besar los genitales. Y sumamente increíble, porque para un hombre ver a una mujer en esta actitud es un guiño para su vanidad, como es para la mujer todas las muestras de amor juntas.
Muchos hombres admiten que se sienten en el más dulce éxtasis cuando una mujer acerca su boca a sus genitales.
Si a las malas palabras: ayudan a desinhibirnos y nadie va a sorprenderse porque lo que decimos cuando la temperatura sube. Si la situación da para hablar, no te contengas de decir lo que sientas con todo tu ser.
Masturbarse juntos: es una de las practicas mas lujuriosas y placenteras, ya sea apoyados contra una pared, mientras la mujer le bajo el cierre del pantalón y le saca el pene, el hombre levanta su pollera y mete los dedos por su bombacha para estimularle el clítoris, para después introducir los dedos en su vagina. Otra variante es frotar el pene contra el clítoris y los labios hasta llegar al orgasmo.
Ideal que el hombre este sin camisa y la mujer que por lo menos tenga los pechos a medio descubrir
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